Esta web utiliza cookies. Si sigues navegando, entendemos que aceptas estas condiciones de uso. OK | Más información

Vivimos nuestro mejor momento

Hace 25 años, en 1988, se fundó el club Tolosako Adiskideok Kirol Elkartea de baloncesto (El Diario Vasco - 2013/07/06)

Destacar hoy en día en cualquier aspecto de la vida es complicado. La competencia es feroz en todos los sentidos. Y el mundo del deporte, desde luego, no se escapa de esa afirmación. Tampoco en Gipuzkoa, la provincia más pequeña del estado, recuerden. El nivel competitivo, participativo, educativo y de resultados está, cada año, en aumento, en ascenso. Además, en todas las disciplinas. Por ello, que un club de Tolosaldea cumpla su primer cuarto de siglo es ya una buena noticia. Y que lo haga, además, con una salud envidiable es una alegría mayúscula. Su trabajo, horas de dedicación y sacrificio les está costando a las personas encargadas de sacar el proyecto adelante. Cuando en una entrevista la primera frase del protagonista es, «estamos en el momento más álgido de nuestra historia, en el mejor momento del TAKE, en cuanto a participación y resultados» entiendes que todos los problemas y preocupaciones de estos años han merecido la pena.

Sí, hablamos del Tolosako Adiskideok Kirol Elkartea de basket. Fundado el 9 de noviembre de 1988. La persona que pronunciaba la anterior frase es Koldo Arsuaga, uno de los fundadores y actual presidente del club. «Tenemos actualmente 17 equipos, tanto masculinos como femeninos, lo que significa que contamos con cerca de 250 jugadores en el club. Además también contamos con una escuela para jóvenes de 10, 11 y 12, en la que toman parte un día a la semana 60 niños y niñas. La participación es muy alta y los resultados estos últimos años están siendo muy buenos. Este año, por ejemplo, el primer y el segundo equipos masculinos han realizado unas temporadas magníficas. Y el junior femenino, también» recuerda Arsuaga. Todo ello hace que el TAKE, se encuentre a día de hoy, entre los mejores clubes de baloncesto de Gipuzkoa, tanto en número de componentes como en resultados deportivos. Unos objetivos logrados desde unos principios muy claros. Los enumera su presidente, «nuestra filosofía es clara. Desde el club queremos fomentar el deporte como actividad recreativa. El TAKE no es solo un club de baloncesto, es como un club social. Digo esto porque hay muy buen ambiente entre todos los estamentos de la entidad, desde el primer al último equipo hay contacto y relación. No nos centramos solo en la competición, a la que obviamente damos importancia, también nos gusta educar en valores, potenciar la igualdad en el club». A estas líneas maestras de actuación añade otra Haritz Arana, el vicepresidente, «todo ello con jugadores de la zona. Tienen prioridad absoluta en el club. El TAKE deber ser un escaparate para la gente de Tolosaldea» dice.

9 de noviembre de 1988

Toda historia tiene su inicio. La del TAKE nos la cuenta Arsuaga, «los equipos de basket que había en Tolosa eran escolares, de Laskorain y Escolapios. También el Tolosa C.F. tuvo sección en su día. Pero era todo muy irregular. Había fases que teníamos equipos en categoría regional y otras en las que no. En el año 88 se aprobó en el Gobierno Vasco un decreto ley en el que se decía que todos los equipos debían ser clubes. En ese momento, el Tolosa no pudo sacar equipo y al no tener club en el que participar, y cumplir con ese decreto ley, nos pusimos manos a la obra y creamos el TAKE. Básicamente fundamos el club por esta razón. Empezamos con cuatro equipos. Dos juveniles, un cadete y el senior que compitió en categoría regional y que rápidamente ascendió a Liga Autonómica. Eran sobre todos jugadores de Escolapios».

El balance de aquellos primeros años es muy positivo. Buenos equipos, buenos resultados y continuos ascensos, bajo el apoyo de una afición entregada. La temporada 93/94 se consiguió subir por primera vez a Liga Nacional. Durante los ocho años siguientes el club jugó seis temporadas en esa categoría y dos en Liga Autonómica. Es decir, un balance más que aceptable. Pero algo no cuadraba. Como encadernar una gran serie de triples, pero no alcanzar al contrario. «Fueron años muy buenos en el primer equipo, pero no tan buenos en la cantera, no la cuidamos. Dejamos de tener equipos en algunas categorías. Tuvimos que tirar de equipos vinculados y al final eso también llegó al primer equipo. Tuvimos jugadores de Donostia, Andoain y Errenteria. El proyecto comenzó a desnaturalizarse. Por este motivo en la temporada 2001-2002 decidimos parar y empezar de cero. Impusimos un cambio global en todo, en la cantera, en los entrenadores, etc. Repescamos a jugadores veteranos para jugar en regional. Fuimos por los colegios buscando jugadores. Organizamos convocatorias para captar nuevos integrantes del club. Durante dos o tres años trabajamos mucho y el resultado lo empezamos a notar a partir del año 2005» rememora Koldo Arsuaga. Es decir, la definición de borrón y cuenta nueva llevada al extremo.

Y el basket se puso de moda

Durante esos años, confluyen otros dos acontecimientos que no hacen más que sumar en el crecimiento del TAKE. Por una parte, en la temporada 2005-2006, el entonces Bruesa Gipuzkoa Basket, logra ascender a la Liga ACB. Por otra parte, el verano de 2006, la selección española de basket ganó en Japón el título de campeona del mundo. «Toda esa ola de victorias, cercanas y lejanas, hicieron que el baloncesto se pusiera de moda y, claro, aquí también se notó» dice Arana. A partir de ese momento llegan los acuerdos con los centros educativos de Tolosa. Gracias a ellos todos los jugadores pasan al TAKE en su edad infantil. Se dan los primeros pasos para formar la escuela. Se apuesta claramente por dar una formación completa a los entrenadores. En definitiva, mucha actividad y mucho trabajo para una reducida Junta Directiva de tres personas. «Entre los tres llevamos todo el tema de la comunicación, contabilidad y dirección. Además también disponemos de una comisión técnica, integrada por cuatro personas, que es la que decide sobre temas deportivos. Tenemos un presupuesto de 90.000 euros. A veces nos da un poco de vértigo mover todo ese dinero. Hemos sido un club con una gestión austera, siempre estrictos. El 50% del presupuesto llega de las cuotas de los jugadores y el otro 50% de las subvenciones y patrocinios que conseguimos. Su papel es clave en estos tiempos» explica Arsuaga, quién también destaca el papel que están desarrollando otras cuatro personas más dentro del club, las encargadas de la comisión del aniversario.

Son cientos los jugadores que durante los últimos 25 años han puesto su granito de arena para que el TAKE sea hoy en día el club que todo el mundo conoce. Ante la pregunta del periodista, «¿cuál es quinteto titular histórico del club?», Koldo Arsuaga cambia, por una líneas, su cargo. Deja la presidencia y hace las veces de entrenador. «De base, Kike Conde. Es el jugador más veterano del basket guipuzcoano. Con 43 años sigue dando guerra como demostró hace unas semanas en Usabal. Además lleva en el club desde la primera temporada. De aleros elijo a Lander Lasa y Goar Artetxe. La elección del primero es obvia. Ha jugado en la ACB y su repercusión en el basket de Tolosa es grandísima. Y Artetxe ha jugado en Azpeitia y en la Liga EBA. El puesto de falso cuatro es para Juan Mari Lasa. Fue un jugador muy importante en las dos fases de la historia del club. Y el puesto de pívot es para Kaiet Bidaurre, también con experiencia en EBA».

Nombres y apellidos éstos, que junto a muchos otros, están ya en el libro de oro de la historia del deporte tolosarra. Y volvemos a la competencia, «tenemos mucha, fútbol, balonmano, atletismo, pelota, etc. El nivel deportivo de Tolosa es grandísimo» dice Arsuaga. En ello tiene que ver, y mucho, el TAKE.

menu
menu